Se trata de un “vaso inteligente” que nos es de gran utilidad para controlar la hidratación de los mayores, tan necesaria en estos días de Julio en el que se han superado y mucho las temperaturas propias de este mes.

El año pasado incorporamos esta novedosa herramienta capaz de detectar si el usuario bebe o no el líquido que necesita a diario para no deshidratarse.

En caso de que no se ingiera el líquido indicado salta una luz de alarma. Toda esta información queda registrada en los ordenadores de la residencia, con el fin de que los profesionales puedan controlar la ingesta diaria de líquido de cada usuario.

Lo único que hay que registrar al día es la cantidad de líquido que el facultativo considere que el usuario tiene que tomar y con la pauta determinada.

Una buena hidratación es fundamental para la salud de las personas mayores.